¿Qué es la Sirah?
La palabra árabe Sirah significa “Biografía”. Entonces, la Sirah del Profeta Muhammad, sallallahu ‘alayhi wa sallam, es su biografía, su historia, su vida.
¿Por qué es importante conocer y estudiar la Sirah del Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam?
a) El musulmán ama al Profeta Muhammad, sallallahu ‘alayhi wa sallam, por todo el bien que él nos enseñó. Es parte de la fe del musulmán amar al Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, y a todos los profetas. Por esto, Al-lah Dijo en el Corán (lo que se interpreta en español): {¡Muhammad!, diles a los creyentes: ‘Si aman a Al-lah, síganme que Al-lah los amará y perdonará sus faltas’}[Corán 3:31]
Cuando uno ama a una persona, quiere saber todo sobre ella, sobre su vida, etc.
b) El Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, es un ejemplo para nosotros, que debemos seguir para poder adorar a Al-lah de la manera correcta. Él nos enseñó cómo es el Islam, y durante toda su vida nos dio una lección práctica de cómo aplicar el Corán en nuestras vidas. Aisha, la esposa del Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, dijo: “El Carácter del Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, era el Corán mismo”; es decir, que siempre se comportaba de acuerdo a lo que ordena Al-lah en el Corán.
c) El conocer la biografía del Profeta Muhammad, sallallahu ‘alayhi wa sallam, nos da más ánimos para practicar el Islam; porque al estudiarla nos damos cuenta que el Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, era una persona como nosotros, a la que Al-lah escogió para enseñar el mensaje del Islam. El Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, se cansaba, sonreía, lloraba, rezaba, ayunaba, se casaba, bromeaba, etc., igual que nosotros; pero siempre de la forma que Al-lah ordena. Por eso, Al-lah Dijo en el Corán (lo que se interpreta en español): {¡Muhammad!, diles a los creyentes: ‘Yo no soy sino un hombre, como ustedes, al que Al-lah le revela que no existe nada ni nadie que merezca ser adorado sino Al-lah…’} [Corán 18:110]
¿Por qué necesitamos que Al-lah envíe Profetas y Mensajeros?
a) La razón humana tiene sus límites y no nos puede ayudar a descubrir el mundo de lo Oculto; es decir, el mundo que está más allá de lo que podemos ver. Por ejemplo, nunca hubiésemos podido saber acerca de los ángeles si no fuera que los mensajeros de Al-lah nos informaron que existen; así como tampoco hubiésemos podido saber del Paraíso o el Infierno si no fuera por ellos, etc.
b) El bien y el mal varían de persona a persona, por eso es imposible que todos nos pongamos de acuerdo sobre lo que es bueno y malo. La idea de lo que es bueno o malo varía según nos conviene. Por ejemplo, si a un alumno le gusta la pluma de otro alumno, se la robará y se dirá a sí mismo que robar no es malo, y pensará que es astuto y no un ladrón. Pero Al-lah es diferente, Él es justo, sólo ordena lo que es bueno para el ser humano y prohíbe lo que es malo, y no toma partido ni actúa según la conveniencia de nadie. Los mensajeros y profetas nos comunican las leyes y la voluntad de Al-lah.
c) Al-lah puso en el ser humano la capacidad de descubrir, por medio de la razón, que Al-lah existe y que Él fue Quien creó todas las cosas; pero, fuera de esto, las personas tienen ideas diferentes. Es decir, que todos estamos de acuerdo en que Al-lah existe y que es el Creador, pero algunos creen que Al-lah es una estatua, o que es la lluvia, la luna o el sol, que tiene hijos, que es uno de varios Al-lahes, etc. Los mensajeros y profetas vinieron a enseñarnos que Al-lah es Uno y que no hay nada semejante a Él. También nos enseñaron que sólo debemos adorar a Al-lah y a nadie más.
d) Todos los seres humanos necesitamos de un guía o un líder. Estos líderes deben ser personas correctas y justas, para así guiar a los demás por el buen camino y apartarlos del mal. Han existido muchos líderes en la historia del hombre, pero sólo los profetas fueron el mejor ejemplo en todos los ámbitos de la vida humana.
Continúa…